miércoles, 26 de septiembre de 2012

La tomé entre mis brazos dandole todo el calor y afecto que podía necesitar, tratando de infectarle con esa confianza y tranquilidad que necesitaba; al final cerró los ojos, relajada, contenta, se quedó dormida en la cuna de mi abrazo; ésta vez no habia ni un atisbo de tensión en su rostro, el cual era enteramente sereno, con una expresión pacifica, sus brazos no mostraban intención de apartarme de ella ni el resto de su cuerpo deseo alguno de huir, estaba completamente tranquila y entregada a mi cuidado; confiaba en mi.
De repente noté, ahora que no se veia a la defensiva mientras dormia, tenía un aspecto sumamente vulnerable, frágil, suave, deseable... No podía resistirme a solamente abrazarla, toque sus mejillas con mis dedos, y su cuello, tan desnudo y suave, me invitaba a darle unos cuantos mordiscos, comence besandole de a poco, lamiendo de vez en cuando; su aroma era unico y adictivo, y ni hablar del sabor de su piel. Besé sus mejillas y labios, dulces, suaves, rosas, parecia que iba a despertar, pero comence de nuevo a sentirme tranquilo y de nuevo a contagiarle de relajación. Me di cuenta, al verla allí indefensa con los parpados cerrados, que ella no era sólo una chica a la cual amaba, no, ella es La chica a la que amo, a la cual cuidaré con todo lo que pueda y la mantendre a salvo aunque tenga que perderme a mi mismo en el proceso... ella es la indicada."

viernes, 14 de septiembre de 2012

-¿Qué sucede? -Le pregunte cuando lo vi acercarse. Me abrazó de una forma extraña y comenzó a hacer cosas de las que jamás lo creí capaz. -¡¿qué haces?! -Grité -¡Detente! -Desobedeció, continuaba aprobechandose de mi debilidad fisica; golpes, empujones, gritos, aruñones, patadas. Todo era inutil. -Basta -Le rogué de nuevo ahogada en sollozos de decesperación. Después de un rato me arrojó al suelo y salió de la habitación. Lloré tirada en el suelo, me levanté para verme en el espejo, me sentía horrible, sucia, usada, sin voz ni derechos, me sentía como un objeto que debia ser tirado a la basura. Furiosa, impotente. Tomé el frasco de perfume y lo estrelle contra el espejo sin soltarlo, los vidrios de ambos calleron por todos lados, con las manos tome las partes del espejo que quedaron en el marco y las jale para terminar de romperlas, las pisé, me tumbé en el suelo y les di con el puño mientras mi frustración de manifestaba en gritos y llantos. Miré mis manos, completamente cubiertas de sangre hasta los antebrazos, y llenas de heridas, habia sangre en mis rodillas, en mi cara, por todo el piso. Todo se volvió borroso y luego desapareció...

viernes, 7 de septiembre de 2012

-Vamos cruza, si no lo haces jamás avanzaras.
-¿Cruzar? He cruzado este mismo arroyo al menos dos veces, no quiero hacerlo de nuevo, es duro y puede causarme daño.
-Mira, lo explicaré de modo que lo entiendas: Si sigues caminando en circulos, siempre tendras que cruzar este mismo arroyo de nuevo; no hay otra salida, así que anda, cruza que quedarte aqui parada no es una opción. Además, ya debes conocerlo bien, debes saber como cruzar por esto y salir ilesa, lo has pasado antes, puedes pasarlo ahora.
-Las veces anteriores tardé mucho, me dolió... preferiría dar marcha atras y volver al verde prado que cruzar por estas aguas traicioneras.
-No harás tal cosa, escuchame, en la vida no se retrocede nunca ¿entiendes? ¡NUNCA! ahora mueve los pies y cruza ese maldito arroyo... Ah, y procura caminar en linea recta esta vez, que no quiero pasar por esto de nuevo.

¿Quién dice que vivir una situación similar a alguna experimentada en el pasado es fácil? 
El dolor es dolor y se vive igual porque se siente en el momento, no es una bateria que se valla gastando. Es más como una gran máquina que se va recargando.
Escuche de nuevo el ruidoso murmuro del silencio, me llamó desde la lejania, como quien extraña al que se ha ido mientras le habla sabiendo que jamás lo escuchará. Llamó a mi vista, que se perdiera cerca, en lo profundo de mis pensamientos, mientras mi oidos hacian caso omiso de mi entorno. Que apagará todo mientras lo hacia funcionar lo mejor posible, ordenó. No huir. No preguntar.
¿Qué es esto? ¿Una lagrima? ...Oh, es verdad, debia parpadear. ¿Importa? ¿Qué es lo importante ahora? ¿Deber? ¿Qué es eso? ...¿Hay algo en este momento que de verdad tenga sentido?

~M. Yaroslava Acosta G.